A todos nos gusta hacer algún deporte: te sientes pletórico mientras tu sistema se pone en marcha y poco a poco va perfeccionando la técnica de este buen hacer. Los hay que corren, a buen trote rítimico, con su mp3 marcando el paso(algunos locos van al margen de la carretera, ummm, qué intoxicación!). Otros van al gimnasio, variedad de modalidades para conseguir moldeado, resistencia, reducir los excesos...también hay quien se nutre la visión con pechos turgentes e hidratada piel sudorosa con marcados movimientos sensuales (de ahí el invento del Gimnasio de Sólo Mujeres, ´pá despellejarse las del mismo sexo).
Entre sudor y sudor hay Bruces Lees que hacen del movimiento una perfección entre coordinación, equilibrios, respiraciones y demás alimentos del Chi, perfeccionamiento de las Bases; la
kata, la completa perfección del movimiento coordinado.
En fin, qué de deportes, a las chicas les va mucho los bonos de varios deportes en cadenas de gimnasios, practican Aerobic, Pilates de relajación, máquinas para la puesta a punto de la
turgencia y la tonicidad muscular...
Yo, Piernas Locas Meri, prometo ejercer mi derecho como futura Re-Ex-Fumadora, pero lo jodido es que sólo hay dos putas actividades deportivas que me encantan, y que me puedo permitir en este cuerpo perezosillo: el Tai-Chi, que me llena de energías y me permite desarrolar un conocimiento equilibrado de mi
Yo Conmigo, y...la natación, deporte incómodo donde los haya en este invierno helado (y termino con un corte de pelo bastante radikal).
Pero qué pasada sería tener ESTO (EstaSoberana Piscinaza), y ejercer tal derecho fundamental... Snif, algún siglo.