
Este es mi rincón de la casa...En los peores momentos me desahoga tocar esas teclas incluso con furia (tengo que afinarlo...jeje); en los buenos te enbriagan las melodías, la luz por la ventana y las flores que han estallado en primavera... (no soy alérgica).
Esperemos que este rincón siempre sea tan sencillo de encontrar, sería un alivio.
Cuando nos quedamos solos ante el eco de nuestros susurros, primero gritaremos angustiados; después, por fin, escucharemos nuestras súplicas... El acierto está en ordenar este tetris de prioridades.